La proteína TTC19, codificada por el gen TTC19, se distingue por su dominio de repetición tetratricipéptida (TPR), caracterizado por varios TPR de aproximadamente 34 aminoácidos cada uno. Estos motivos no son exclusivos de la TTC19 y pueden encontrarse en una plétora de organismos, desde bacterias a hongos y plantas. Estos motivos son fundamentales para facilitar las interacciones proteína-proteína, por lo que resultan esenciales en el intrincado entramado de los procesos celulares. Integrada en la membrana mitocondrial interna, la TTC19 desempeña un papel decisivo en la formación del complejo III de la cadena respiratoria mitocondrial. Sin embargo, ésta no es su única función, ya que también está implicada en la citocinesis. No se puede exagerar la importancia del TTC19, sobre todo si se tiene en cuenta que las mutaciones de este gen se han relacionado con la deficiencia del complejo III mitocondrial. Esta deficiencia puede tener un efecto en cascada en toda la cadena de transporte de electrones, dado el papel fundamental que desempeña el complejo en la síntesis de ATP y en el metabolismo energético celular en general.
Cuando se explora el ámbito de los inhibidores de la TTC19, se entra en un paisaje en el que las sustancias químicas actúan para atenuar la función de la TTC19, ya sea directamente uniéndose a la proteína o indirectamente modulando los sistemas en los que opera la TTC19. Estos inhibidores suelen operar a nivel molecular, aprovechando el poder del reconocimiento molecular para interferir con la estructura o la función de la TTC19. Algunos inhibidores pueden bloquear los sitios activos o de unión de la proteína, impidiéndole participar en sus procesos celulares habituales. Otros podrían alterar su conformación, haciéndola menos eficaz o totalmente inactiva. Otra clase de inhibidores podría no interactuar directamente con la TTC19, sino dirigirse a proteínas adyacentes o interactuantes, alterando el papel de la TTC19 en el marco celular más amplio. Se trata de una delicada danza de interacciones moleculares, en la que los inhibidores intentan alterar el ritmo al que se mueve la TTC19, modulando así su impacto en la fisiología celular.
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| Nombre del producto | NÚMERO DE CAS # | Número de catálogo | Cantidad | Precio | MENCIONES | Clasificación |
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Antimycin A | 1397-94-0 | sc-202467 sc-202467A sc-202467B sc-202467C | 5 mg 10 mg 1 g 3 g | ¥609.00 ¥699.00 ¥18525.00 ¥51897.00 | 51 | |
La antimicina A es un inhibidor del complejo citocromo bc1 (complejo III) de la cadena mitocondrial de transporte de electrones. Se une al sitio Qi, impidiendo la transferencia de electrones. Un efecto indirecto sobre el TTC19 puede alterar su papel en el mantenimiento de la estabilidad y la función del complejo III. | ||||||
Myxothiazol | 76706-55-3 | sc-507550 | 1 mg | ¥1636.00 | ||
El mixotiazol inhibe el sitio Qo del complejo III mitocondrial. Esta alteración impide el flujo de electrones a través del complejo, afectando potencialmente a la función de proteínas como la TTC19 que participan en el ensamblaje o mantenimiento del complejo III. | ||||||
Atovaquone | 95233-18-4 | sc-217675 | 10 mg | ¥2990.00 | 2 | |
La atovacuona es una hidroxinaftoquinona que inhibe el complejo citocromo bc1. Tiene efectos potenciales en la cadena de transporte de electrones, lo que a su vez podría afectar al papel de la TTC19 en la mitocondria. | ||||||
Methylene blue | 61-73-4 | sc-215381B sc-215381 sc-215381A | 25 g 100 g 500 g | ¥474.00 ¥1151.00 ¥3633.00 | 3 | |
Aunque no es un inhibidor directo del complejo III, el azul de metileno puede aceptar electrones y desviarlos, afectando potencialmente al flujo general de electrones en la cadena mitocondrial en la que opera la TTC19. | ||||||