ME3 Inhibidores

Los inhibidores comunes de ME3 incluyen, pero no se limitan a Alloxan monohidrato CAS 2244-11-3, Rotenona CAS 83-79-4, Antimicina A CAS 1397-94-0, Azida sódica CAS 26628-22-8 y Oligomicina CAS 1404-19-9.

Los inhibidores químicos de la ME3 pueden ejercer sus efectos inhibidores a través de varios mecanismos que afectan a la función mitocondrial, ya que la ME3 depende de una matriz mitocondrial en buen estado para su actividad enzimática. El aloxano, al inhibir selectivamente la secreción de insulina inducida por la glucosa, afecta a la función mitocondrial debido a la estrecha relación entre la señalización de la insulina y la dinámica energética mitocondrial. Este enfoque reduce indirectamente la actividad ME3 al disminuir la disponibilidad de sustrato. Del mismo modo, la rotenona, un conocido inhibidor del complejo I mitocondrial, puede provocar una reducción de la respiración mitocondrial, disminuyendo la actividad de la ME3 al reducir la cadena de transporte de electrones, que es esencial para la producción de ATP mitocondrial, una fuente de energía crítica para la actividad de la ME3. La antimicina A, al inhibir el complejo III, puede alterar el transporte de electrones, inhibiendo indirectamente la ME3 a través de una disminución del gradiente de protones que es necesario para la síntesis de ATP. La azida sódica y el cianuro actúan sobre la citocromo c oxidasa, reduciendo el potencial de membrana mitocondrial y la síntesis de ATP, lo que inhibe indirectamente a la ME3 al reducir su suministro de energía.

En la misma línea, la oligomicina puede inhibir la ME3 bloqueando la ATP sintasa, lo que conduce a una reducción inmediata de los niveles de ATP. El TTFA, un inhibidor del complejo mitocondrial II, también puede reducir indirectamente la actividad de la ME3 limitando la respiración mitocondrial y la producción de energía. El atractilosido, al inhibir el translocador de nucleótidos de adenina, interrumpe el intercambio ADP/ATP a través de la membrana mitocondrial, afectando así a la función de ME3 al alterar la relación ADP/ATP. La carboxina inhibe la succinato deshidrogenasa (complejo II), lo que puede conducir a una inhibición indirecta de la ME3 al alterar el metabolismo energético mitocondrial y reducir la producción de intermediarios metabólicos necesarios para la actividad de la ME3. El papel del malonato como inhibidor competitivo de la succinato deshidrogenasa ejemplifica aún más la estrategia de interrumpir el ciclo del ácido cítrico para reducir la producción de sustratos necesarios para la actividad de ME3. Por último, la azida, al igual que la azida sódica, inhibe la citocromo c oxidasa y puede provocar una disminución de la eficacia de la cadena de transporte de electrones, lo que inhibiría indirectamente la ME3 al reducir la síntesis de ATP, esencial para su función enzimática.