dsg1β Inhibidores

Los inhibidores comunes de dsg1β incluyen, entre otros, disulfiram CAS 97-77-8, α-yodoacetamida CAS 144-48-9, vitamina K3 CAS 58-27-5, cloruro de cadmio, anhidro CAS 10108-64-2 y óxido de fenilarsina CAS 637-03-6.

Los inhibidores químicos de la Dsg1β actúan a través de diversos mecanismos para alterar la función de la proteína. El ebseleno actúa reaccionando con los grupos tiol de los residuos de cisteína de la Dsg1β, un proceso que puede provocar la interrupción de la adhesión intercelular. Esto se debe a que los grupos tiol son críticos para mantener la integridad estructural y la función de la proteína. Del mismo modo, el disulfiram inhibe la Dsg1β mediante la formación de enlaces disulfuro con residuos de cisteína, lo que puede alterar la conformación de la proteína y perjudicar su funcionalidad adhesiva. La Yodoacetamida, otro inhibidor, alquila los residuos de cisteína de la Dsg1β, impidiendo la formación de puentes disulfuro que son necesarios para la correcta función y estabilidad de la proteína. En presencia de menadiona, la Dsg1β se inhibe por la inducción de estrés oxidativo, que promueve la formación de especies reactivas de oxígeno que modifican los residuos de cisteína, perturbando las interacciones adhesivas de la proteína.

Otros inhibidores, como el cloruro de cadmio y el acetato de plomo (II), se unen a los grupos sulfhidrilo de la Dsg1β, lo que puede interferir en sus interacciones proteína-proteína y desestabilizar su función. El Óxido de Fenilarsina, al entrecruzar los residuos de cisteína, puede perturbar las capacidades estructurales y adhesivas de Dsg1β. El metilmetanosulfonato actúa metilando residuos de cisteína, induciendo cambios conformacionales que perjudican la función de la proteína. Por el contrario, la N-etilmaleimida forma aductos estables con los residuos de cisteína, lo que provoca la modificación irreversible de la Dsg1β y afecta a su integridad estructural y a sus propiedades adhesivas. Además, la o-fenantrolina y el clioquinol inhiben la Dsg1β al quelar iones metálicos esenciales e iones de zinc, respectivamente, que son importantes para la estructura y la función de la proteína. Por último, el Timerosal se une a los grupos tiol dentro de la Dsg1β, lo que conduce a la inhibición de las interacciones adhesivas de la proteína y las funciones celulares.