DnaJC17 Inhibidores

Los inhibidores comunes de DnaJC17 incluyen, pero no se limitan a, quercetina CAS 117-39-5, tunicamicina CAS 11089-65-9, ciclosporina A CAS 59865-13-3, MG-132 [Z-Leu- Leu-Leu-CHO] CAS 133407-82-6 y geldanamicina CAS 30562-34-6.

Los inhibidores químicos clasificados como inhibidores de DnaJC17 engloban una serie de compuestos que interactúan con procesos y vías celulares asociados indirectamente con la función de la proteína DnaJC17. La DnaJC17, como parte de la familia de proteínas de choque térmico, concretamente la Hsp40, desempeña un papel crítico en el plegamiento de proteínas y el mantenimiento de la proteostasis. Los inhibidores de esta categoría no son directamente antagonistas de la DnaJC17, sino que ejercen su influencia a través de la modulación de las redes de proteostasis y la actividad chaperona. Por ejemplo, los compuestos que inhiben la Hsp90 pueden provocar un efecto cascada en el que se alteren las actividades de las chaperonas asociadas, incluidas las mediadas por la DnaJC17. Los inhibidores de la Hsp90, como el 17-AAG, se unen al dominio ATPasa de la Hsp90, provocando la desestabilización de sus complejos de proteínas cliente. Esto, a su vez, puede perjudicar el ciclo funcional de co-chaperonas como DnaJC17, que son fundamentales para el correcto plegamiento y funcionamiento de los polipéptidos nacientes.

Otro enfoque incluye el uso de disruptores de la proteostasis como la tunicamicina o el MG132, que interfieren en las vías de glicosilación y degradación de proteínas, respectivamente. La tunicamicina obstruye la glicosilación ligada al N, una modificación fundamental para el correcto plegamiento y estabilidad de las proteínas, afectando así a la red de proteostasis general en la que opera DnaJC17. Por otra parte, la MG132 bloquea la vía de degradación proteasomal, lo que conduce a una acumulación de proteínas mal plegadas, aumentando así la demanda de la maquinaria de plegamiento de proteínas, incluida la DnaJC17, y podría saturar su capacidad. Además, estresores celulares como la Concanamicina A y la Cloroquina alteran la homeostasis celular al alterar los niveles de pH de los orgánulos o interferir con la función lisosomal, lo que puede conducir a un estado en el que el entorno de plegamiento de proteínas se vea comprometido y las chaperonas como DnaJC17 tengan una mayor carga de trabajo.