β-1,4-Gal-T4 Inhibidores

Los inhibidores comunes de la β-1,4-Gal-T4 incluyen, entre otros, la sal sódica de uridina 5'-difosfato CAS 21931-53-3, la 2-Deoxi-D-glucosa CAS 154-17-6, el PD 98059 CAS 167869-21-8, el MG-132 [Z-Leu- Leu-Leu-CHO] CAS 133407-82-6 y la castanospermina CAS 79831-76-8.

Los inhibidores químicos de la β-1,4-galactosiltransferasa 4 (β-1,4-Gal-T4) pueden interferir en la función de la enzima a través de diversos mecanismos bioquímicos. El UDP es un inhibidor competitivo que actúa en el sitio activo de la β-1,4-Gal-T4 e impide la unión de sus sustratos naturales. Esto reduce eficazmente la actividad glicosiltransferasa de la enzima al bloquear el proceso catalítico habitual. Del mismo modo, la 2-Deoxi-D-glucosa actúa como un análogo del sustrato, incorporándose a las glicoproteínas en lugar de los azúcares habituales. Esta incorporación altera la capacidad de la enzima para reconocer y procesar correctamente sus sustratos. Por otra parte, el PD98059 actúa sobre la vía de señalización MAPK/ERK, que tiene efectos reguladores sobre la β-1,4-Gal-T4, disminuyendo así indirectamente la actividad de la enzima. El MG132, un inhibidor del proteasoma, provoca una acumulación de glicoproteínas mal plegadas, lo que puede saturar la maquinaria de plegamiento de proteínas de la célula y reducir la disponibilidad de sustratos correctamente plegados necesarios para la función de la β-1,4-Gal-T4.

Además, inhibidores como la Castanospermina y la Swainsonina interrumpen el procesamiento de las glicoproteínas al inhibir las glucosidasas y la mannosidasa II, respectivamente, enzimas necesarias para el correcto plegamiento y recorte de las glicoproteínas, que luego modifica la β-1,4-Gal-T4. Dicha inhibición conduce a una reducción de la actividad de la enzima debido a la falta de sustratos correctamente procesados. La nojirimicina y su derivado, la desoxinojirimicina, actúan sobre las hexosaminidasas y las glucosidasas, respectivamente, lo que provoca un exceso de glucoproteínas procesadas incorrectamente que compiten con los sustratos correctos por la atención de la enzima. La inhibición de la mannosidasa I por la kifunensina también da lugar a glicoproteínas mal procesadas, que no son adecuadas para la acción de la β-1,4-Gal-T4. La brefeldina A altera la estructura y la función del aparato de Golgi, donde se localiza y actúa la β-1,4-Gal-T4, lo que afecta gravemente a la capacidad de la enzima para modificar las glicoproteínas. Por último, la tunicamicina y la 1-Deoximanojirimicina impiden la formación de glicosilación ligada a N e inhiben la mannosidasa I, respectivamente. Al hacerlo, garantizan que las glicoproteínas que sirven de sustratos para la β-1,4-Gal-T4 no se creen en la forma correcta o no se procesen adecuadamente, inhibiendo así la función general de la enzima.