Angptl2 Inhibidores

Los inhibidores comunes de la Angptl2 incluyen, pero no se limitan a, Fenofibrato CAS 49562-28-9, Pioglitazona CAS 111025-46-8, WY 14643 CAS 50892-23-4, GW501516 CAS 317318-70-0 y Rosiglitazona CAS 122320-73-4.

Los inhibidores de ANGPTL2 pertenecen a un variado grupo de compuestos que interactúan con ANGPTL2 o sus vías relacionadas, influyendo en su expresión o función. Estos inhibidores no constituyen una clase homogénea de moléculas, sino que se caracterizan más bien por su capacidad de afectar a la expresión, regulación o vías de señalización asociadas al ANGPTL2. Abarcan una serie de mecanismos, como la activación de los receptores activados por el proliferador de peroxisomas (PPAR), la modulación de las enzimas del metabolismo lipídico y la alteración de la actividad de la proteína cinasa activada por AMP (AMPK). Los compuestos mencionados incluyen derivados del ácido fíbrico como el fenofibrato, tiazolidinedionas como la pioglitazona y estatinas, que intervienen principalmente en la regulación del metabolismo lipídico. Compuestos como la metformina y la rapamicina también aparecen en esta lista debido a su influencia en las vías metabólicas que pueden modular indirectamente la actividad ANGPTL2.

Las acciones de estos compuestos, aunque no inhiben directamente el ANGPTL2, pueden provocar una disminución de su expresión o un cambio en la actividad de las vías en las que participa el ANGPTL2. Por ejemplo, los fibratos y las tiazolidinedionas activan isoformas específicas de PPAR, que se sabe que regulan la expresión de varios genes, incluido el ANGPTL2, contribuyendo así a alterar los niveles de ANGPTL2. Del mismo modo, las estatinas, que actúan sobre la biosíntesis del colesterol, pueden influir incidentalmente en la expresión del gen ANGPTL2. La activación de AMPK por la metformina y la inhibición de mTOR por la rapamicina son otros ejemplos de cómo los reguladores metabólicos pueden tener efectos secundarios en la señalización de ANGPTL2. La inclusión de compuestos naturales como la curcumina y los ácidos grasos omega-3 pone de relieve la diversidad de moléculas que pueden afectar a las vías relacionadas con el ANGPTL2, predominantemente a través de efectos antiinflamatorios y la modulación de los perfiles lipídicos, respectivamente.